Ayer 23 de abril celebramos el dia del libro o el día de Sant Jordi como cuenta la tradición con una rosa y un libro pasamos el día. Coloreamos una rosa y estuvimos memorando los libros de la infancia.
Eran muchos los que aun se acordaban de su libro favorito de la infancia, o de los libros con los que comenzaron a leer ( Los de catón, los de cartilla...)..A muchos de ellos les hacía sentirse más autónomos el hecho de haber aprendido a leer y a escribir cuando eran chicos. A otros, por las circunstancias de la vida: Por la guerra, por trabajar en el campo....Tuvieron que abandonar los estudios y se arrepienten solo del hecho de no haberlo intentado. Otros que nunca tiraron la toalla, como Francisco que en la mili hizo de sus hazañas para poder escribir aunque fuera su nombre, o Adolfo para aprender a leer los prospectos de los medicamentos cuando el dolor acudía a ellos. Y cabe destacar a Carmen Marta que con tan solo ocho añitos ya recitaba poesías y ganaba libros como premio. Eufemia quien mucho emoción describía que los libros son para quererlos, para pasarlo todo a tu corazón y sentir lo que estas leyendo.
Llegaba el momento de finalizar la clase y hablando sobre libros, cuentos, poesías...Llegamos a la conclusión de que la mayoría de estos reflejaban todos el amor y un final feliz.
Para despedirnos que mejor que hacerlo con un cuento de Jorge Bucay, inolvidable como todos los cuentos.
http://www.youtube.com/watch?v=LdkcvvO7wY0
En defintiva, una clase de 30 personas llenas de sabiduría con muchos libros leidos, a parte del libro en el que ellos mismos son sus propios autores, el de su propia vida.
